¿Cómo fomentar la autonomía de un niño?

En sus edades más tempranas, lo niños deben aprender un concepto de vital importancia llamado autonomía. En la edad infantil su fomento es primordial pues ayudará a que los peques se desarrollen correctamente y puedan comenzar procesos de autoaprendizaje, autoestima y otra serie de aspectos fundamentales. La premisa es que debemos dejar que los pequeños hagan las cosas por sí solos. Descubriendo así aptitudes y capacidades en sí mismos que antes no sabían. Y aunque esto resulte muy sencillo de explicar escribiendo esto en unas poca palabras, la verdad es que es un proceso que se hace difícil tanto a padres como a hijos, pues la dependencia de sus primeros meses de vida es total de la familia. Por ello, queremos dar unos consejos para reforzar la idea de la autonomía, así como saber proceder sin agobios innecesarios.

Distintas alternativas

Una buena manera de comenzar este viaje es la de ofrecer diversas opciones y alternativas a elegir con el principal objetivo de que el niño desarrolle la toma de decisiones y sus consecuencias. Es decir, que comience a valorar las opciones que tenga en base a sus propios criterios, y aprender a vivir con las consecuencias de sus acciones y elecciones.

Retos que se compliquen progresivamente

Poner a prueba a nuestros hijos mediante la realización de retos y nuevas pruebas en su vida cotidiana también es recomendable. Por supuesto, adaptados a su edad. Podemos ir incrementando la dificultad de los mismos poquito a poco para que vayan aprendiendo a afrontar los problemas solos y a darles solución. Los padres deberán ayudarles si lo necesitan, pero nunca hacerlo por ellos. Si el reto lo superas tú solo para que tu peque se sienta mejor, estás siendo totalmente contraproducente. Por poner un ejemplo: Ponerse las zapatillas y atarse los cordones. En un principio solo le debemos pedir a nuestro hijo que se ponga los calcetines. Una vez superada esta etapa, podemos pedirle que se coloque las zapatillas para cuando domine estos pasos, intente abrocharse los cordones solito. Podemos ayudarles mostrando como se hace pero nunca haciéndolo por ellos. Cuando consiga hacer todo esto, el pequeño gozará de satisfacción y habrá aprendido por sí solo, con todas las consecuencias positivas que conlleva: autoestima, aprendizaje, capacidad..

Fomentar el razonamiento propio

Es muy importante que los padres fomentemos el razonamiento de nuestros pequeños y nunca darles la solución de primeras. Por impaciencia podemos caer en la tentación de hacerlo nosotros, pero volvemos a lo mismo: es contraproducente. Nuestros hijos deben pensar por ellos mismos, usar su lógica, usar sus capacidad y emplear sus pies, manos y mente en solucionar su problemas y realizar las acciones convenientes. Rara vez nuestros pequeños conseguirán su cometido a la primera, pero ahí estamos nosotros para animarlos y empujarlos hacia la acción correcta. Nuestros peques desarrollarán su inteligencia, e incluso nos sorprenderán con lo listos que pueden llegar a ser.

Reconocer el acierto y el error, desde un punto de vista crítico

El sentido crítico es algo fundamental también, pues es uno de los aspectos que nos permiten ver si algo está mejor o peor hecho, aprender de ello, y hacerlo mejor. Por lo tanto a nuestros peques también hay que mostrarles cuando se han equivocado y alentarlos a seguir luchando por aquello que quieren conseguir. De esta manera desarrollarán un criterio en el que verán reflejadas sus acciones y actuarán en consecuencia. Además, la satisfacción personal de conseguir superar las adversidades les hará desarrollar, no solo el autoestima, sino un afán de superación que en el mundo adulto les vendrá fenomenal. También el sistema de recompensas es muy útil, aunque con cuidado. Tampoco debemos acostumbrar a nuestros hijos a esperar algo a cambio, pero sí que debemos recompensar con cariño y admiración sus logros. Por pequeños que sean.

Todo este aprendizaje a través del juego

Hacer un par de semanas hablábamos de la importancia de jugar en familia. La mejor forma de aprender que tiene un niño es jugando, por lo que en este caso es también el medio a emplear para trabajar la autonomía de nuestros pequeños. A través de los juegos tendrán que solventar muchos problemas, reflexionar sobre situaciones, actuar en consecuencia.. No hay mejor forma de enseñar a un peque. 100% garantizado.

Sin más que contar, esperamos que este artículo os haya servido mucho. Pronto volveremos con más artículos sobre educación infantil. Para leer más, entra en nuestro blog